Strength of Schedule

Dos palabras difíciles de pronunciar que tienen mucha relevancia en el baloncesto universitario: Strength of Schedule. Como ya se explicó en un post anterior, habiendo más de 350 equipos en la División 1 de la NCAA y jugando unos 30 partidos cada equipo, es imposible que jueguen todos contra todos. Así que cada equipo tiene un conference schedule de unos 18 partidos en los que juega contra los equipos de su misma conferencia y además cada equipo se confecciona su non-conference schedule en el que juega contra 10-12 equipos que no son de su conferencia.

El strength of schedule es una métrica que intenta cuantificar la dificultad del calendario de cada equipo. Es mucho más sencillo ganar partidos si perteneces a la Ivy que hacerlo en la Big 12. Es mucho más fácil ganar partidos si tu non-conference schedule está plagado de equipos de la Southland, la SWAC o la MEAC, que si te planificas un calendario contra buenos equipos de la ACC, Big 10 o PAC-12. Es menos complejo ganar partidos si juegas 20 de los 30 partidos en tu cancha, que si solo juegas 12 en ella. Hay entrenadores que prefieren un calendario duro para sus equipos, como por ejemplo Calipari con Kentucky, de tal forma que sus jugadores lleguen muy preparados al Torneo, aunque puedan haber perdido muchos partidos. Y otros como por ejemplo Louisville la temporada pasada, que quitando de un par 2 enfrentamientos contra Kentucky y Michigan State, jugó contra 10 equipos a los que ganó de 30 puntos de media.

¿Para qué se utiliza el Strength of Schedule?

A la hora de elegir a los equipos para participar en el Torneo de la NCAA (aquellos que no han ganado el torneo de su conferencia), el comité tiene muy en cuenta el strength of schedule de cada equipo. También se tiene en cuenta el strength of schedule a la hora de establecer el ranking semanal de los 25 equipos mejores del campeonato, así como los cabezas de serie en el Torneo de la NCAA. El comité puede puntuar más una “buena derrota”, que una “mala victoria”, por ejemplo perder de 1 contra Kansas tiene mucho más mérito que que ganar de 30 a Bradley.

Además es otro tema más del que los aficionados de los distintos equipos pueden discutir durante todo el campeonato, que crea controversia entre los medios de comunicación a la hora de valorar a tal o cual equipo y que ayuda a divertirnos aún más si cabe con el college basketball.